CÓMO GESTIONAR EL MIEDO
¿Qué es el miedo? Es algo que creamos los seres humanos a partir de una idea, de pensar que aquello a lo que nos enfrentamos es potencialmente peligroso. Normalmente reaccionamos ante los desafíos de la vida de la misma manera que si estuviéramos ante un peligro real.
Pongamos el caso de que vamos caminando por la montaña y nos topamos de frente con un perro en actitud agresiva. Nos sentimos amenazados, en peligro y nuestro primer impulso podría ser huir o quedarnos paralizados por el miedo, actos gobernados por un pensamiento inconsciente. Pero la respuesta también puede basarse en nuestra capacidad para mantener la calma y en obrar con seguridad, haciendo uso de nuestros conocimientos y de la técnica para hacer frente a esa situación, es decir, de la confianza en uno mismo, y ello tiene que ver con un pensamiento consciente.
Ahora imaginemos que queremos emprender algo en nuestra vida, algo que pensamos que nos haría feliz, pero implica un riesgo. Imagina que eres una persona creativa y quisieras poder vivir de tus creaciones, pero para ello tienes que abandonar la seguridad que te ofrece un trabajo que no te satisface, con una antigüedad y una nómina fija. La respuesta volvería a ser la misma que en el caso del perro: huir o quedarte paralizado, negándote a ti mismo e hipotecando tu felicidad, o enfrentarlo con los recursos personales de que dispones.
La clave estriba en la gestión del miedo, fundamentado normalmente en creencias limitantes del tipo “no puedo”, “no soy capaz”, “no es realista”, etc… que residen en la mente inconsciente o de la confianza en tus capacidades, originados en la mente consciente. Si no lo intentas, no tendrás éxito, pero el éxito no es solo la consecución de unos resultados, sino la experiencia que se deriva de haberlo afrontado. Partamos de la base de que no existe el fracaso y cambiemos este sustantivo por “experiencia” o “recurso adquirido”.
Hablamos aquí del aprendizaje, del modelado personal ante situaciones que nos obligan a salir de nuestra zona de confort al enfrentarnos a lo desconocido. ¿Cómo crees que serías mejor conductor, si toda tu vida llevaras un coche por una autopista recta sin apenas tráfico y sin ningún tipo de obstáculo o conduciendo por ciudad, carreteras secundarias de curvas, con lluvia, niebla, etc…?
Lo que marca la diferencia entre lo que una persona cree que es y lo que está destinada a ser es la actitud ante uno mismo. Todos disponemos de un poder personal inmenso, de un tesoro oculto. La abundancia es inherente a nosotros, pero frecuentemente elegimos vivir en la carencia por el peso de nuestros pensamientos inconscientes. A veces, incluso, es necesario que alguien identifique ese potencial en el otro y se lo muestre para que lo pueda ver, ya que uno mismo puede estar completamente ciego.
Se nos ha dado una vida para usarla, no para simplemente conservarla. Podemos vivir o podemos morir en vida. Todo lo que no hagamos nos estará privando del principal objetivo de la vida que es experimentarse y conocerse a uno mismo para así sentirse completo y en paz consigo y con el mundo.
Oscar Oliver
Mentor en desarrollo personal y gestión emocional
Instagram: @armoniavital.es
